viernes, 18 de diciembre de 2020

Programa #278 - Leyenda Mística

Leyenda Mística - Leyenda Mística

Con ustedes, el podcast 278 de Cerca de la Orilla, para que lo tengan y lo escuchen a la hora que quieran.

Esta emisión fue dedicada al proyecto de progresivo mexicano Leyenda Mística, donde además de apreciar su material musical, tuvimos una amena charla con Anton Diego Matus, responsable de este proyecto musical.

Podcast: 


Lista de canciones: 

Leyenda Mística - Artista Leyenda Mística, disco Leyenda Mística 

El flechador del cielo - Artista Leyenda Mística, disco Leyenda Mística 

La creación - Artista Leyenda Mística, disco Ciudad dormida 

Pájaro de 400 voces - Artista Leyenda Mística, disco Leyenda Mística 

Notas suicidas - Artista Leyenda Mística 

La peregrinación Azteca - Artista Leyenda Mística 


Ficha técnica: 
Fecha de publicación: 18/diciembre/2020 
Rúbricas: Nora García 
Producción integral: Javo Aguirre 

¡Saludos místicamente progresivos!

lunes, 14 de diciembre de 2020

Figuras y siluetas de la gloriosa resurrección avant-progresiva de AKSAK MABOUL

Aksak Maboul - Figures

HOLA, AMIGOS DE CERCA DE LA ORILLA, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy nos complace enormemente poder hablar en tiempo presente de esa entidad musical belga llamada AKSAK MABOUL, la cual, bajo el liderazgo del teclista-vientista-percusionista Marc Hollander, fue una de las figuras predominantes dentro de la persistencia del rock progresivo vanguardista (mal llamado rock-in-opposition) en la Europa Continental a fines de los 70s. Decíamos que hablamos de esta entidad en tiempo presente porque el grupo, ahora centrado en torno al dúo de Hollander y Véronique Vincent (otrora vocalista de THE HONEYMOON KILLERS), ha resucitado con fuerza hasta el punto de tener un disco nuevo en su currículum: “Figures”, publicado en doble CD y en el blog de Bandcamp de la banda el pasado 22 de mayo. Poco después se concretó la edición en doble vinilo por vía del sello de Hollander Crammed Discs, al igual que el doble CD. En total, el material ocupa un espacio de 75 ½ minutos. “Figures” contiene una copiosa cantidad de 22 piezas: hay figuras sónicas de todos los colores y expansiones en el repertorio de este disco, desde miniaturas de menos de medio minuto (hasta un cuarto de minuto) hasta otras piezas más desarrolladas que oscilan entre los espacios de 4 ¼ minutos y 8 ½ minutos. La principal conexión de este disco con la primera etapa de AKSAK MABOUL es con el primer disco “Onze Danses Pour Combattre La Migraine” (1977), aunque hay mucho más que un ejercicio de nostalgia calculada aquí. De hecho, estos resucitados AKSAK MABOUL adoptan modismos y trucos del jazz contemporáneo, el avant-prog de las dos últimas décadas (a veces hallamos confluencias con grandes nombres como RASCAL REPORTERS y THINKING PLAGUE), el jazz-prog, retorcimientos Zappianos y pop psicodélico a través del exhaustivo repertorio de este álbum. En concreto, los reformados AKSAK MABOUL conforman un quinteto nuclear que se completa con Faustine Hollander [bajo, guitarras acústica de 12 cuerdas y eléctrica, y voz], Lucien Fraipont [guitarras] y Erik Heestermans [batería y percusiones]. La lista de colaboradores es larga e incluye varios nombres insignes dentro de la amplia tradición del rock experimental: Michel Berckmans (fagot), Steven Brown (voz), Fred Frith (viola y guitarra), Julien Gasc (voz y sintetizador), Audrey Ginestet (coros y grabaciones de campo), Benjamin Glibert (guitarra y coros), Jordi Grognard (clarinete, clarinete bajo y flauta), Martin Méreau (batería, vibráfono y percusión), Jean-François Jones Jacob (tabla), Martin Méreau (batería, percusión y vibráfono) y Sebastiaan Van den Branden (guitarra y percusión). Sí, hemos detectado en esta nutrida lista a ilustres veteranos asociados a UNIVERS ZERO, HENRY COW y MACHINE MASS TRIO. El propio Marc Hollander, aparte de dedicarse a sus aportes habituales de teclados, clarinete, clarinete bajo y saxofón alto, también tocó ocasionalmente el bajo, la guitarra y algunas percusiones. La grabación de todo este material contenido en “Figures” tomó bastante tiempo, y además se extendió en varios estudios: Maboul Manor, Les Ateliers Claus, Pyranide y Mont De Piété. El ulterior proceso de masterización tuvo lugar en el estudio parisino de La Source Mastering. Bueno, vayamos ahora al repertorio mismo de este doble álbum, ¿vale? 

Aksak Maboul

Hay figuras sónicas de todos los colores y expansiones en el repertorio de este disco, desde miniaturas de menos de medio minuto hasta otras piezas más desarrolladas que oscilan entre los espacios de 4 ¼ minutos y 8 ½ minutos. De hecho, la pieza de cierre es la más extensa. Todo comienza con la dupla de ‘Among The Naeporu’ y ‘C’est Charles’, la primera, una miniatura colorida y ágil donde se da un contrapunto entre el teclado y el clarinete, la segunda, una canción psicodélica que se sitúa a medio camino entre el nu-jazz y una modalidad sombría de Canterbury. La caja de ritmos aporta un aire mecanizado al asunto mientras que las florituras de piano eléctrico crean un recursos de exquisitez; el canto asume todo el tiempo un aura de majestuoso misterio. ‘Taciturne’ cumple con la función de hacer un viraje hacia un entramado y una atmósfera guiados hacia lo extrovertido y lo grácil, siendo así que el agradable desarrollo temático va transitando desde expresividades razonablemente contenidas hasta otras un poco más robustas. Cuando el canto entra a tallar, la trama musical se complica hasta abrirse a desafiantes juegos disonantes que tienen algo de Zappiano. Un temazo que se erige como el primer cénit del álbum. No fue nada taciturna esta canción a despecho de su título, pero sí lo es un poco ‘Silhouettes’, además de un poco distante y ceremoniosa. Tras el ímpetu fulguroso de ‘Taciturne’, el ensamble de AKSAK MABOUL nos regaló un retrato sonoro de climas noctámbulos que parecen esconder algo inescrutable tras su manto oscuro. ‘True, False, Fictive’ es básicamente una pieza solista de piano apoyada sobre un trasfondo de conversaciones en un bar, pero un extraño viraje sutilmente denso en el tramo final anuncia el arribo de ‘Histoires De Fous’, una canción alegre que de inmediato despeja toda niebla densa que amenazaba con inundar el ambiente para explayarse sobre un groove animado. A través de la pretendida apariencia de inocencia popera que parece imponerse a través del desarrollo temático se muestra un aura traviesa a través de la cual se entrevé una espiritualidad galantemente insolente. Al final, algo parece estar difuminándose cuando la coda proyecta un breve recurso de indescifrable languidez. Un dinamismo muy bien logrado el de esta canción. ‘Sophie La Bévue’ es una breve balada jazzera con piano, armonio y voz, muy ceremoniosa, muy encerrada en torno a su propia delicadeza expresiva.

‘Formerly Known As Défilé’ es un colorido viaje instrumental donde el sereno vitalismo generado por la deliciosa amalgama de teclados y vientos se alimenta adecuadamente del swing sintético de la caja de ritmos. Los ulteriores ornamentos de guitarra ayudan a acrecentar el vigor expresivo en curso. Tal vez es nuestro instrumental favorito de todo el álbum. ‘How Should One Read A Book?’, por otro lado, es un ejercicio de dadaísmo puro donde la táctica del caos destructivo es empleada efímeramente como un inteligente truco disruptivo. ‘Spleenétique’ sigue en buena medida la senda de intrigante y misteriosa vivacidad de ‘Histoires De Fous’, pero con una estructuración más ambiciosa respecto a las modalidades progresivas que se dan respecto a la ingeniería rítmica y las variantes de ambiente. Sin duda, aquí hallamos confluencias con la línea de trabajo de THINKING PLAGUE, y también percibimos algunas vibraciones cósmicas en ciertos fraseos de guitarra que dirigen lo pasajes más tensos de esta estupenda canción. Otro momento culminante del disco, no cabe duda. ‘Sgraffites’ es un collage futurista y arcano que tiene algo de Lynchiano (a lo Eraserhead), semejante a los artificios deconstructivos de HENRY COW durante su etapa 74-75. ‘The Untranslatable’ es la pieza de minuto y medio que se encarga de abrir el segundo volumen de “Figures”. En lo poco que dura ocurre mucho: primero hay un preludio sereno de carácter impresionista, y luego hay una proyección electrónica afín al patrón de HARMONIA… y el gancho de este último momento dura demasiado poco porque hay que abrir campo a la dupla de ‘Retour Chez A.’ y ‘Dramuscule’. El primero de estos temas mencionados sigue explorando el perfil más ligero del ensamble; el motif es amable y grácil, aunque no exento de algunos momentos un poco más grisáceos que aportan un interesante recurso de variedad al asunto. La adición del violín en los últimos momentos añade un color muy especial a la paleta sonora integral. Por su parte, ‘Dramuscule’ establece un extravagante ejercicio de tecno-pop discotequero donde el canto es reemplazado por un diálogo y los vientos ocupan el rol protagónico dentro del armazón instrumental. ¿Puede alguien imaginarse una canción del primer álbum de SOFT CELL que recibe un tratamiento deconstructivo de parte de una asociación de músicos de CLUSTER y ART BEARS? Pues así es la cosa. De paso, es muy simpática la inserción de la línea en español “Los sueños, sueños son” en medio del diálogo.

Aksak Maboul - Figures

‘Excerpt From Uccellini’ exhibe un minúsculo ejercicio de tensiones enclavadas entre golpes percusivos asertivos y psicodélicos armazones de teclado. Por su parte, ‘Un Caïd’ es otro ejercicio de pop extrovertido e inteligentemente sofisticado. ‘Martial Arts For Boys’, ‘Un Certain M.’ e ‘Ins Bleistiftgebiet’ conforman una cadena de piezas breves que transitan de lo dadaísta a lo surrealista con matices sombríos, y de allí a lo celestial con afinidades krautrockeras. ‘Fatrasie Pulvérisée’ es una canción sobria y serena que ostenta algunos indicios de jovialidad en ciertos arreglos de clarinete y teclado. ‘Qu’est-ce Que C’est “Mot”?’ es otra pieza en clave de balada jazzera, con un matiz satírico bastante acentuado. Como dijimos en el primer párrafo de la presente reseña, ‘Tout A Une Fin’ es el tema más extenso del disco y también es el que le da cierre. El cariz recurrente de su núcleo temático es ostensiblemente grisáceo y el groove a medio tiempo permite que la patente espiritualidad inquietante inherente al mismo se explaye con señorial resolución. Los múltiples teclados utilizados aquí arman un colorido ambicioso que llega a un nivel de crescendo envolvente y contundente mientras la pieza se aproxima a su final. Un soliloquio acompaña a esta acción postrera a fin de darle un raíz solemne al epílogo. Todo esto fue el catálogo de “Figures”, el disco que magníficamente nos devuelve a AKSAK MABOUL a la línea de frente de la vanguardia musical del nuevo milenio. Este retorno a la escena fonográfica es muy aplaudido por nosotros, así como lo ha estado siendo desde hace varios meses en diversas redes dedicadas a la difusión del rock progresivo y experimental. ¡Miles de millones de gracias por resucitar este enclave de exquisita y atemporal vanguardia, gente de AKSAK MABOUL!



Muestras de “Figures”.-


miércoles, 9 de diciembre de 2020

Programa #277 - Pure Reason Revolution

Pure Reason Revolution

Con ustedes, el podcast 277 de Cerca de la Orilla, para que lo tengan y lo escuchen a la hora que quieran.

Esta emisión fue dedicada por completo al grupo británico Pure Reason Revolution.

Podcast:


Lista de canciones: 

Aeropause - Artista Pure Reason Revolutión, disco The Dark Third

Goshens Remains - Artista Pure Reason Revolutión, disco The Dark Third 

The Bright Ambassadors of Morning - Artista Pure Reason Revolutión, disco The Dark Third 

Victorious Cupid - Artista Pure Reason Revolutión - disco Amor Vincit Omnia 

Deus Ex Machina - Artista Pure Reason Revolutión - disco Amor Vincit Omnia 

Blitzkrieg - Artista Pure Reason Revolutión - disco Hammer and Anvil

Open Insurrection - Artista Pure Reason Revolutión - disco Hammer and Anvil 

Armistice - Artista Pure Reason Revolutión - disco Hammer and Anvil 

Silent Genesis - Artista Pure Reason Revolutión - disco Eupnea 


Ficha técnica: 
Fecha de publicación: 9/diciembre/2020 
Rúbricas: Nora García 
Producción integral: Javo Aguirre 

¡Saludos, desde la pura razón revolucionada!

miércoles, 2 de diciembre de 2020

KANSAS y la persistencia de su presencia dentro del escenario progresivo actual

 Kansas - The Absence Of Presence

HOLA, AMIGOS DE CERCA DE LA ORILLA, LES SALUDA CÉSAR INCA.

En esta ocasión tenemos el enorme gusto de presentar el nuevo trabajo de la veterana y robustamente vigente banda estadounidense KANSAS, el cual se titula “The Absence of Presence”. El grupo sigue adelante con el empuje creativo conquistado en el disco precedente “The Prelude Implicit”, de hace 4 años atrás, pero esta vez con un vigor más pronunciado dentro del planteamiento sonoro general. La formación del ahora septeto es casi la misma que gestó el mencionado disco con la permanencia de Phil Ehart [batería y percusión], Rich Williams [guitarras eléctricas y acústica], Billy Greer [bajo y voz], Ronnie Platt [voz], David Ragsdale [violines y coros] y Zak Rizvi [guitarras eléctricas], pero ahora el teclista Tom Brislin reemplaza a David Manion. A él le conocemos como integrante ocasional de RENAISSANCE, YES y CAMEL, cofundador del proyecto THE SEA WITHIN, entre otras cosas. No solo trae Brislin su virtuosismo y visión sofisticada del rock a esta legendaria banda, sino que también compone él solo cuatro de los nueve temas incluidos en este disco, y por si esto fuera poco, hasta asume el rol de vocalista principal en uno de éstos (además de hacer coros en otras canciones). Con un repertorio que ocupa un espacio total de poco menos de 47 minutos y medio, “The Absence of Presence” salió al mercado a mediados del pasado mes de julio por vía del sello alemán Inside Out Music en asociación con Sony Music, tanto en CD como en ediciones especiales de vinilo (azul, verde o lila), además de CD con Blu-ray y un formato que incluye entrevistas a los miembros de la banda. Al igual que con el disco precedente, Rizvi se hizo cargo de la producción principal de la banda junto con las adicionales labores de coproducción asumidas por los eternos Ehart y Williams. Veamos ahora los detalles específicamente musicales del disco. 

Kansas - The Absence Of Presence

Durando poco más de 8 ¼ minutos, la pieza homónima abre el álbum con un despliegue de vitalismo expresionista que se mueve cómodamente en la senda del paradigma prog-sinfónico. En sí mismo, el groove de la canción es más solemne que intrépido, pero exhibe una convincente garra rockera a través de la conexión de diversos pasajes que transitan entre lo rápido y lo lento, utilizando a veces algunos tempos complejos, y también abriendo campo a un efectivo interludio en clave hard-rockera (casi a lo URIAH HEEP) con variantes Emersonianas. Con algunos ornamentos orquestales de teclado y las estratégicamente ubicadas intervenciones del violín, el esquema grupal se siente rico en matices a lo largo del camino con impecable consistencia, lo cual repercute muy positivamente en la elaboración de un hermoso clímax epilogar. Un gran inicio de álbum, sin duda, un clímax de entrada. ‘Throwing Mountains’ sigue a continuación con la misión de jugar con un medio tiempo mientras desarrolla un foco temático marcado por un gancho señorial y ceremonioso; de esta manera, el punche dominante de la canción asume una majestuosidad serena que ayuda al nervio sonoro a desarrollarse con claridad melódica. La pomposidad de talante orquestal que entra a tallar para abrir la puerta al intermedio instrumental es algo propio del paradigma de KANSAS, mientras que los dos solos sucesivos de guitarra arrastran ese empuje a la par que guían el camino de regreso al motif central. El gran impacto inicial sigue vigente en este momento. ‘Jets Overhead’ es una semi-balada penetrada por una calidez luminosa que, desde su propia aureola de constricción, permite que las oleadas de las guitarras se asienten con gracilidad mientras el violín asume un rol particularmente protagónico. Los teclados, desde un segundo plano, se encargan de armar un trasfondo orquestal oportunamente discreto. Con la dupla del instrumental ‘Propulsion’ y la balada ‘Memories Down The Line’, la banda nos brinda un espacio de casi 7 minutos para expansiones sonoras que apuntan hacia algo razonablemente bombástico dentro de la esencia más puramente histórica del sinfonismo propio de KANSAS. El primero de estos temas es vibrante, luciendo orgullosamente sus magníficos centelleos a lo YES-con-ELP, y es así como la última nota sostenida de órgano, mientras se va desvaneciendo, anuncia el arribo de la primera nota de piano con la que habrá de comenzar el siguiente tema. Como dijimos antes, se trata de una balada, siendo así que está signada por una aureola reflexiva que tiene algo de vulnerabilidad. Al principio, es el violín el instrumento protagónico dentro del armazón instrumental general, pero luego son las guitarras las que centralizan el acrecentamiento expresivo con el que termina la canción.

Kansas - Phil EhartKansas - Tom Brislin

‘Circus Of illusion’ nos muestra al septeto volviendo de lleno a la exploración de su faceta más propiamente extrovertida: un esquema rítmico marchoso, un desarrollo melódico amigable, un uso ingenioso de las diversas armonías y riffs de las dos guitarras, y, como no puede faltar, una irrupción estratégica del violín que aporta un magnetismo majestuoso al elegante nervio rockero en curso. Tampoco puede faltar un viraje de tonalidades en el intermedio que afiance la esencia progresiva de la ingeniería grupal. ‘Animals On The Roof’ instaura, a paso firme, una continuación de los aires extrovertidos y preciosistas que ya disfrutamos en la canción precedente (así como en las dos primeras del repertorio), aunque su peculiaridad está ahora en que el groove armado por la dupla rítmica .tiene una soltura más notoria y una agilidad más fresca. Esto es posible porque el motif principal es más vivaz que en ‘Circus Of illusion’. Eso sí, prestemos atención a un detalle genial que nos toma de sorpresa: alrededor de la frontera del segundo minuto y medio, el grupo apela a un recurso de espléndido colorido cuando arma un intermedio envolvente al estilo de una cruza entre YES y GENTLE GIANT, y aunque el grupo no tarda mucho en volver al cuerpo central, este interludio dejó una pista a seguir para los últimos segundos de la sección epilogar. La secuencia de estas dos canciones tan bombásticas ha significado una importante dosis de frescura para la espiritualidad que se exuda desde esta serie de nuevas ideas musicales creadas por la banda. ‘Never’ es la única composición del álbum donde Platt interviene en la letra. Es la otra balada del álbum, y al igual que ‘Memories Down The Line’, se explaya cabalmente a través de un ambiente de tersa vulnerabilidad. Se abren espacios para sendos solos de violín y de guitarra (uno de los más bellos solos de guitarra del álbum) a fin de que el desarrollo temático adquiera solventes dosis de esplendor y corpulencia dentro del garbo afectado que la ocasión impone. ‘The Song The River Sang’ – la canción donde Brislin hace la voz principal – cierra el álbum, y lo hace como lo que es, el cénit concluyente y apodíctico del mismo. La combinación de músculo, vitalidad y sofisticación influye positivamente en el modo en que el esquema melódico, sostenido por vivaces compases inusuales, va hilando todos sus componentes individuales. Las estrategias de articulación entre el violín y los teclados en el intermedio acogen grácilmente los ecos de todo lo que sucedió anteriormente, y el espíritu sentencioso que marca al epilogo es manejado con un brío rotundo y contundente. El final abrupto acentúa efectistamente la majestuosidad ínsita en este espléndido fin del camino. 

Kansas - Ronnie PlattKansas - Zak Rizv

Todo esto fue lo que se nos brindó en “The Absence of Presence” de parte de esta comunidad de KANSAS que da muchos indicios de buena salud creativa en esta nueva etapa de su longeva carrera, una carrera afortunadamente vigente dentro de la escena actual del rock artístico. Tal como señalamos en el primer párrafo de la presente reseña, este álbum nos muestra una garra nueva y acrecentada en los tiempos actuales de KANSAS, por lo que resulta ser, a fin de cuentas, un disco muy digno de la tradición que le precede desde aquella lejana década de los 70s. Toda esta nueva sangre que se ha metido impetuosamente en las venas del organismo de este grupo desde 2015 ha servido para darle un empuje de nueva cosecha a una campiña que preserva su esencia artística de manera coherente y perseverante. 



Muestras de “The Absence of Presence”.-


viernes, 27 de noviembre de 2020

Programa #276 - Aspic

Aspic - Stars Collide

Con ustedes, el podcast 276 de Cerca de la Orilla, para que lo tengan y lo escuchen a la hora que quieran. 

Esta emisión fue dedicada al grupo salvadoreño de metal progresivo Aspic, donde además de apreciar su material musical, tuvimos una amena charla con dos de sus integrantes: la vocalista Paola Guardado y el tecladista Carlos Regalado.

Podcast:


Lista de canciones: 

Parallax - Artista Aspic, disco Stars Collide 

Under Melting Skies - Artista Aspic, disco Stars Collide 

Stars Collide - Artista Aspic, disco Stars Collide 

The Event Horizon - Artista Aspic, disco Stars Collide 

What We Are - Artista Aspic, disco Stars Collide 


Ficha técnica: 
Fecha de publicación: 27/noviembre/2020 
Rúbricas: Nora García 
Producción integral: Javo Aguirre 

¡Saludos salvadoreñamente progresivos!

lunes, 23 de noviembre de 2020

Segundo menú progresivo de los alemanes SPROINGG, un menú ecléctico y audaz

Sproingg - Clam

HOLA, AMIGOS DE CERCA DE LA ORILLA, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy prestamos atención a la agrupación alemana SPROINGG y su nuevo álbum titulado “Clam”, el mismo que fue publicado en el último tercio del pasado mes de setiembre. Este colectivo afincado en la bella ciudad de Friburgo está conformado por Prudi Bruschgo [guitarra eléctrica y guitarra barítono], Erik Feder [batería] y Johannes Korn [Chapman Sticks y violín eléctrico], siendo su enfoque progresivo una amalgama extrovertida y lúdica de psicodelia progresiva, densidades Crimsonianas propias de los 90s en adelante, punk-jazz, avant-prog, prog-metal de corte experimental, math-rock y extravagancias Zappianas. Se trata del segundo disco de larga duración tras su homónimo álbum de debut que data de julio de 2017, siendo ambos publicados de forma independiente bajo la modalidad de autoproducción. El grupo presume de poder ser encasillado de diversas maneras: caos experimental polirrítmico, excesivo minimalismo progresivo, psicodelia space-rockera fusionada con el punk y el ambient, rock dramático influenciado por el jazz y la cámara. Obviamente, todos estos rótulos grandilocuentes (tomados de algunas reseñas de su primer álbum) son anotados por el trío con un abierto sentido del humor, pero también son adecuadas pautas descriptivas para lo que nos aguarda en éste, su segundo álbum.

Sproingg

Yendo ahora al repertorio mismo, sus 9 primeros minutos están ocupados por ‘Stuffer Gapes And Drapes His Cape On A Vaping Ape (Including Destiny’s Abortion)’. Lo que se nos muestra aquí en un inicio es un groove ágil en 6/8 cuyo potencial luminoso se enfrenta al contraste de tensión razonablemente oscurantista que la guitarra y el Stick articulan en su amalgama diseñada para concretar una cruza entre el paradigma Crimsoniano y el patrón de los inolvidables FOREVER EINSTEIN. Más adelante, las cosas viran hacia un ejercicio de jazz-rock de modalidad libre donde la tensión antes mostrada a medias se apodera de la situación, entrando ahora al terreno de NAKED CITY. Para el bloque final, el trío se enfoca vivazmente en el despliegue de vigor expresivo que se fue conquistando gradualmente y gesta un epílogo en clave de jazz-metal. Tras esta impactante pieza de apretura sigue ‘(Impure Thoughts) Pure Cushion’, cuya función es la de encauzar el nervio incandescente e implacable del trío de una manera más frontalmente arquitectónica. Tras una sección prologar de tendencia cósmica emerge un cuerpo central que ostenta una garra ampulosa, que no apabullante, mientras la batería establece un fabuloso groove en clave de experimentación fusionesca. La capa espacial subyacente permanece incólume bajo el jam armado por el trío hasta que éste se detiene, momento en el que se muestra fehacientemente para armar un escueto epílogo. ‘Z’Mörgele’ se encarga de preservar la aventurera energía expresiva de las dos piezas precedentes por vía de un ejercicio de vitalismo neurótico Crimsoniano a través de los filtros del FRED FRITH TRIO y GUTBUCKET, eso sí, con un gancho más patente. Con las variantes que van emergiendo a lo largo del camino, el trío se dispone a jugar con diversas dosis de combustión jazz-progresiva, llegando ésta en algunas instancias a tornarse bastante contenida. Estos tres primeros temas del álbum han instaurado un continuo clímax del mismo. ‘Lovebird Dogbane Receives Higher Education’, en su mayor parte, exhibe una faceta más ligera del trío, lo cual quiere decir que su gusto por las disonancias y la densidad extravagante está arropada por una vivacidad un poco más fulgurosa que la que hemos percibido en el repertorio anterior, un poco a lo UPSILON ACRUX. Eso sí, a través de estas vibraciones arquitectónicamente saltarinas, la musculatura y la sofisticación siguen vigentes sin perder un átomo de sus respectivas relevancias. Ya para la sección epilogar, la banda crea una ambientación crepuscular y sutilmente tenebrosa.

‘And Her Name Was “Jo-Jo, The Dog-Faced Boy”, Part 1’, que dura 3 minutos y pico, establece un juego de marañas disonantes Crimsonianas sobre un señorial y delicado swing jazz-rockero. Hay algo de vitalidad saltarina en el extremadamente complejo desarrollo temático diseñado para la ocasión, pero su expresividad está convenientemente controlada por la interacción meticulosamente equilibrada que elaboran las cuerdas y la batería. Con el jocoso título de ‘Progg Is A Five-Letter Word’, el sexto tema del álbum exhibe una dinámica cruza entre los senderos de los STICK MEN y PRESENT para el asentamiento y la puntuación de su motif central. También entra a tallar en algún momento un pasaje ceremonioso que sirve para instaurar un recurso señorial desde el cual el trío muestra su faceta más propiamente espacial, algo al modo de un replanteamiento Crimsoniano del paradigma de STEVE HILLAGE. La pieza más extensa del repertorio dura casi 12 minutos clavados y se titula ‘Stuffer Vapes And Drapes His Cape On A Gaping Ape’, y su misión principal es la de retomar uno de los índices temáticos del tema #1 a fin de expandirlo a través de la lógica de la más combativa versatilidad. El inicio se da en clave space-rockera con ribetes de jazz metal filtrados a través del patrón Crimsoniano que siembran un terreno de belicosa tensión, algo bien acentuado por los juegos de síncopas en los que se centra la batería. En medio de esta atmósfera terrorífica emerge un misterioso y hermoso solo de violín. Poco antes de llegar a la frontera del séptimo minuto, el viaje musical en curso se remite a un swing más suelto, haciendo que el despliegue de músculo rockero se sienta un poco más punzante. La batería vuelve a usar síncopas, siendo así que éstas ahora se adaptan a un realce mecanicista de lo que queda del jam. Las últimas líneas de violín se proyectan solitariamente hacia una ambientación evocadora. El título más largo pertenece a la pieza que cierra el álbum: ‘In A Recent Survey, 4 Out Of 5 Clinically Depressed, Middle-Aged Suburbanites Strongly Preferred New And Improved Jizzo™ Brand Cream Cheese To A Mortally Wounded Clam’. Para la primera sección, su carácter aguerrido establecido sobre un compás complejo y el talante puntilloso de las cuerdas concretan un muy logrado ejemplo de hibridización entre prog psicodélico, math-rock y punk jazz. Poco antes de llegar a la frontera del segundo minuto, todo se detiene abruptamente para que emerja una secuencia cósmica aleatoria, la cual prepara el terreno para un ágil jam de tenor prog-metalero. Todo vuelve a detenerse para que la guitarra haga una circunspecta serie de fraseos en solitario, y luego el trío regrese a un groove muy semejante al original; de este modo, todo termina para este tema y para el álbum. 

“Clam” es una sorpresa intensa y agradable para una de las varias vertientes vanguardistas de la música progresiva hecha hoy en día. Este trío alemán SPROINGG se ha lucido a lo grande desde su rincón friburgués para mantener viva la llama del ideal del rock como arte aventurero, ecléctico y audaz. Vale la pena seguirles la pista a los Sres. Bruschgo, Feder y Korn, la verdad que sí. ¡Recomendado al 100%!... ¡O más!



Muestras de “Clam”.-



viernes, 20 de noviembre de 2020

Programa #275 - Humbral

Humbral - Social Puppet

Con ustedes, el podcast 275 de Cerca de la Orilla, para que lo tengan y lo escuchen a la hora que quieran. 

Esta emisión fue dedicada al grupo mexicano de prog Humbral, donde además de apreciar su material musical, tuvimos una amena charla con Edgar Arias, guitarrista, vocalista y fundador de la agrupación.

Podcast:


Lista de canciones: 

Sueño - Artista Humbral, disco Social Puppet

Social Puppet - Artista Humbral, disco Social Puppet

Self-Consumption - Artista Humbral, disco Social Puppet

December 4th - Artista Humbral, disco Social Puppet

Sombra - Artista Humbral, disco Social Puppet

Psychosis - Artista Humbral, disco Social Puppet


Ficha técnica: 
Fecha de publicación: 20/noviembre/2020 
Rúbricas: Nora García 
Producción integral: Javo Aguirre 

¡Saludos rockeros desde la bella airosa progresiva!

sábado, 14 de noviembre de 2020

La segunda visita de RING VAN MÖBIUS, triunvirato regio del retro-prog noruego

Ring Van Möbius - The 3rd Majesty

HOLA, AMIGOS DE CERCA DE LA ORILLA, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Siguen lloviendo las buenas noticias progresivas desde Escandinavia, esta vez desde la localidad noruega de Karmøy, donde opera el trío RING VAN MÖBIUS; el nuevo disco de este ensamble, “The 3rd Majesty”, fue publicado en el penúltimo día de octubre pasado por el sello Apollon Records, tanto en CD como en vinilo (en versiones de color negro, dorado y transparente plateado). RING VAN MÖBIUS está conformado por Thor Erik Helgesen [órgano Hammond L100, piano eléctrico Fender Rhodes, clavinet, sintetizadores, piano de cola, voz y coros], Håvard Rasmussen [bajo, Moog Theremin, modulador y efectos de sonido] y Dag Olav Husås [batería, tímpanos, gong, campanas tubulares, glockenspiel, otras percusiones y coros]. El material contenido en este disco fue grabado en el Spectral Tape Studio. En algunos pasajes del repertorio de “The 3rd Majesty”, el trío contó con la colaboración de un cuarteto de cuerdas conformado por Nabo Nayuki (violín), Nora Myrset Asheim (violín), Darya Govorun (viola) y Petro Sokach (cello). Por lo pronto, estamos al tanto de los muchos elogios que este disco ha venido recogiendo en estas últimas semanas en las redes difusoras de rock progresivo y afines, y este blog se une al coro de elogios. Una vez más, tenemos a una banda escandinava dignificando al ideal del rock artístico lo grande; en este caso particular de RING VAN MÖBIUS, tenemos un disco intenso, bien enfocado y de excelente factura. Si “Past The Evening Sun” encarnó hace un par de años un excelente amanecer para la visión musical del grupo, “The 3rd Majesty” instaura una auténtica oda al mediodía, el momento de la sombra más corta y la manifestación más vibrantes de los colores del mundo. Bueno, veamos ahora los detalles de su repertorio.

Ring Van Möbius - The 3rd Majesty

La suite ‘The Seven Movements Of The Third Majesty’ ocupa los primeros 22 minutos y pico del álbum, y consta de las siete secciones correspondientemente tituladas ‘Universal’, ‘Spectrum’, ‘Reaction’, ‘Bilateral’, ‘Zenith’, ‘Strife Of The Icons’ y ‘Altitude Over Azimuth’. Con un golpe de gong ampliado en la consola para crear un efecto parecido al de un golpe de ventisca, se anuncia el momento en el que el trío entra en acción con un despliegue elegante de furia majestuosa al modo de un híbrido entre VAN DER GRAAF GENERATOR, QUATERMASS y EGG, y más adelante, cuando entran a tallar algunos solos de sintetizador marcados por una cósmica pomposidad, algunos elementos Emersonianos también entran a tallar en algunos pasajes donde se establece una cruza perfecta entre sinfonismo y psicodelia. Es en estos momentos donde la dupla intensifica la arquitectura que va remodelando a lo largo del camino de acuerdo a las imponentes exigencias expresionistas. Por su parte, algunas partes cantadas, penetradas por un groove lento y una espiritualidad ceremoniosa, nos remite a una cruza entre PROCOL HARUM y CRESSIDA; éstas son agradables y solemnes, portadoras de una suntuosidad muy sobria. Poco antes de llegar a la frontera del minuto 11, se arma un motif en 5/4 que se mueve bajo un cariz etéreo, siendo así que la dupla rítmica se toma su tiempo para dejar aflorar el nuevo recurso de tensión que se ha gestado ahora. A partir de allí, un nuevo bloque instrumental crea otro pasaje de confluencia entre los paradigmas de VDGG, ELP y DICE, con una inclinación más precisa hacia el oscurantismo emocional de los primeros. Poco a poco, la liberación de la tensión se transforma en algo más aguerrido y denso, siendo así que la batería asume un rol protagónico fundamental a la hora de facilitar al bloque sonora desplegar su tormenta inherente. El siguiente pasaje nos devuelve al ámbito de lo ceremonioso mientras el canto sigue adelante con la pasión nerviosa que había signado a la sección precedente. Con un pequeño pasaje bélico se arma el puente hacia la sección conclusiva, la misma que se complace en desarrollar un adicional esquema sinfónico imperialmente suntuoso, orquestado con la inspiración de parte de los espíritus de los maestros STRAUSS y WAGNER. Definitivamente, esta suite tiene vida propia, ya sea como parte de un álbum o desde su propia individualidad: cénit decisivo del disco, y posiblemente, lo mejor que ha compuesto el trío hasta el momento. 

Ring Van Möbius - The 3rd Majesty        Ring Van Möbius - The 3rd Majesty

Todavía nos queda por disfrutar la segunda mitad del repertorio, la cual se inicia con una canción titulada ‘Illuminati’. Comienza con un aura convincentemente llamativa y ágil que se apoya solventemente sobre swings rockeros y jazzeros en diferentes pasajes que se van alternando. Más adelante, las cosas se serenan bastante y transitan hacia una modalidad ceremoniosa donde se combinan lo meditabundo y lo crepuscular. Si en los parajes ágiles que marcaron a la primera mitad de esta canción predominó la presencia de lo barroco en los arreglos de los teclados (particularmente, el clavinet), en la segunda mitad predominó lo gótico. Durando casi 11 ¼ minutos, ‘Distant Sphere’ se extiende por un espacio de más de 11 minutos para decir todo lo que tiene que decir. El prólogo de 2 minutos está armado por un canto sereno arropado por un cuarteto de cuerdas, tras lo cual emerge un primer cuerpo central que brinda un dinamismo bien focalizado donde el piano eléctrico hace flotar grácilmente sus fraseos para guiar la cristalización de sonoridades frescas. Luego, tras un breve interludio psicodélico guiado por un órgano vivazmente distorsionado, el grupo establece un nuevo motif en clave jazz-progresiva con algunos matices de Canterbury (algo que los emparenta en cierto modo con los también escandinavos SARCOPHAGUS NOW), y así, el trío se dispone a jugar con un nuevo tipo de sofisticación musical. Para los tres minutos finales, el grupo arma un ceremonioso y denso epílogo donde se combinan lo evocador y lo intenso, culminando todo con una breve coda de piano eléctrico que brinda unos últimos segundos de relax emocional. Los últimos 9 minutos del disco están ocupados por ‘The Möbius Ring’, que resulta ser la pieza más extrovertida del álbum, y, de paso, otro cénit del mismo. Con un renovador colorido que nos lleva a los paradigmas de YES y ELP, además de algunos aires de familia con sus compatriotas de WOBBLER, el grupo hace gala de una soltura bastante fulgurosa a la hora de manejar los complejos armazones rítmicos y las no menos complejas variaciones temáticas que se van sucediendo. Algunos pasajes austeros y circunspectos emergen para establecer momentáneos contrapuntos al fulgor musical predominante, un truco bastante conveniente a la hora de apuntalar elegantes ardides de tensión controlada. El generoso epílogo crea un crescendo majestuoso e imponente que se ajusta penetrantemente al paradigma sinfónico. ¡Qué gran final para tan estupendo disco!

Ring Van Möbius - The 3rd Majesty

En fin, todo esto es lo que nos ha brindado el excelente triunvirato RING VAN MÖBIUS con “The 3rd Majesty”, un catálogo de radiantes exhibiciones musicales que refuerza el rol importantísimo que tiene la escena vanguardista escandinava dentro del gran escenario internacional del rock progresivo. Podemos estar seguros de que estos tres señores se han superado a sí mismos respecto a su estupendo disco de debut, esta segunda visita al palacio arcano y aristocrático del ideal retro-progresivo ha sido sumamente fructífera, y por ello, recomendamos este álbum al 300% (un ciento completo por cada integrante de la banda). 



Muestra de “The 3rd Majesty”.-
The Seven Movements Of The Third Majesty: https://www.youtube.com/watch?v=W6FvHpKDsTg


miércoles, 11 de noviembre de 2020

Programa #274 - Saedín

Saedín - Entre ríos

Con ustedes, el podcast 274 de Cerca de la Orilla, para que lo tengan y lo escuchen a la hora que quieran. 

Esta emisión fue dedicada al grupo español de metal sinfónico Saedín, donde además de apreciar su material musical, tuvimos una amena charla con Zoraida Vidal, tecladista del grupo.

Podcast: 


Lista de canciones: 

Entre ríos - Artista Saedín, disco Entre ríos 

Ganas de soñar - Artista Saedín, disco Amor en Granada

La Alianza - Artista Saedín, disco Entre ríos

Castillo rojo - Artista Saedín, disco Entre ríos

Corazón nazarí - Artista Saedín, disco Entre ríos


Ficha técnica: 
Fecha de publicación: 11/noviembre/2020 
Rúbricas: Nora García 
Producción integral: Javo Aguirre 

¡Saludos sinfónicamente metaleros!

sábado, 7 de noviembre de 2020

El florecimiento cósmico de THE SPACELORDS

The Spacelords - Spaceflowers

HOLA, AMIGOS DE CERCA DE LA ORILLA, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy estamos presentando aquí el nuevo disco del grupo de space-rock progresivo alemán THE SPACELORDS, el cual se titula “Spaceflowers” y fue publicado el pasado 21 de febrero en diversas variantes de vinilo (verde traslúcido, amarillo y dorado con manchas negras), así como en CD, por el sello Tonzonen Records. También el sello estadounidense Olde Magick Records produjo una edición en casete de “Spaceflowers” más tarde, en el mes de agosto. Haciendo un poco de historia, este grupo se formó en el segundo trimestre del año 2008 por vía de las iniciativas conjuntas del guitarrista Matthias “Hazi” Wettstein, el baterista Marcus Schnitzler y el bajista Klaus Werz. Al poco rato se les unió el flautista Holdi Pape, pero este formato de cuarteto no duró mucho, pues Pape solo se quedó en las filas de THE SPACELORDS hasta finales de 2009. El debut fonográfico del grupo que ahora nos ocupa tuvo su lugar con su disco homónimo del año 2010, el cual contenía material grabado con la entonces operativa formación de cuarteto. Discos posteriores como “Synapse” (2014) y “Water Planet” (2017) hicieron del ya reformulado trío un grupo con un público de culto firme y leal: de hecho, estos dos discos que acabamos de mencionar son usualmente considerados como de lo mejor de su vigente catálogo. El año 2020 se da el turno de “Spaceflowers” para dejar su propia huella dentro de este paradigma propio de space-rock y psicodelia progresiva de THE SPACELORDS, que hoy por hoy está conformado por Wettstein, Schnitzler y el bajista Akee Kazmaier. El trío ha contado, a lo largo del disco, con las ocasionales colaboraciones de Didi Holzner (órgano Hammond y sintetizador Moog), Alwin Puetsch (didgeridoo) y Ralph Nebl (zurna). Además, el propio Wettstein toca el saz en la segunda parte de la suite, mientras que Kazmaier añade partes de guitarra y de melódica a lo largo de las tres partes. Por su parte, pasando a otra dimensión del disco que aquí reseñamos, el baterista Schnitzler se hizo cargo del arte gráfica del álbum.

The Spacelords

Vayamos ahora a los detalles mismos del disco. La pieza homónima, que dura 13 ½ minutos y ostenta una contundente fuerza de carácter, abre el álbum con la misión de instaurar unos referentes enérgicos para lo que habrá de ser la identidad integral del repertorio. Por lo pronto, se instaura un groove llamativo a medio tiempo que establece unos cimientos firmes y seguros para el aura ceremoniosa que habrá de imperar a lo largo de la pieza. Con un pie en la psicodelia antigua de los PINK FLOYD de la etapa 68-71 y el krautrock guitarra-céntrico de unos GILA y unos ASH RA TEMPEL, y otro en la nueva generación space-progresiva de CAUSA SUI y AUTOMATISM, la triangulación de guitarra, bajo y batería crea un despliegue de creciente densidad mientras el swing básico persiste. Con la muy oportuna adición del órgano, el bloque sonoro colectivo añade recursos de señorío y magnificencia a su entramado sonoro; de hecho, hay momentos en los que el órgano (muy a lo Richard Wright pero con una musculatura más cercana al estilo de un Vincent Crane) asume cierto protagonismo con algunas variantes armónicas antes de que la pieza llegue a la frontera del séptimo minuto. Es a partir de este momento que el jam cambia de motif con una prestancia aguerrida que permite al sintetizador emerger como contraparte creativa de la guitarra. A la par, la pieza se ha vuelto más robusta y más intrigante; a pesar de la obvia extroversión que empuja al bloque instrumental, se impone un cierto aire de misterio en el ambiente, como si todo se hubiese vuelto grisáceo en medio del tumulto mundano. Excelsas exploraciones cósmicas para un muy buen inicio del disco. Tras la pieza homónima sigue otra de largo aliento, durando un par de minutos menos que ‘Spaceflowers’: se titula ‘Frau Kunhkes Kosmos’. Aquí el grupo apuesta por un dinamismo más frenético que el utilizado para el armazón del tema de entrada, y ya desde el punto de arranque, la dupla del bajista y el baterista asienta el esquema de trabajo planteado para la ocasión. Se nota tanto en el nervio performativo como en la espiritualidad luminosa del cuerpo central que el enfoque psicodélico de este tema es fulguroso y jovial. A mitad de camino, el grupo decide aligerar un poco la densidad reinante con un juego de síncopas que permite al bloque instrumental añadir sutilezas al desarrollo temático. 

La segunda mitad del álbum está ocupada por la suite tripartita de poco más de 24 ¼ minutos ‘Cosmic Trip’: definitivamente, es aquí donde el trío elabora las mayores ambiciones estéticas de la línea de trabajo plasmada en este álbum, es a todas luces un ítem diseñado para cerrar el repertorio a lo grande. Las tres partes sucesivas portan los lacónicos títulos de ‘Part 1’, ‘Part 2’ y ‘Part 3’. Con una potencia de carácter stoner para las dos guitarras partícipes y un patrón rítmico parsimonioso, el grupo explora su faceta más sombría, la cual a veces se deja iluminar cuando entran a tallar algunas capas seudo-mellotrónicas dentro de la ingeniería sonora. El groove se vuelve un poco más adusto (hasta mecanizado) en la segunda parte, lo cual revela la intención de la banda de afianzar machaconamente una atmósfera particularmente evocadora. Los ornamentos de sintetizador, melódica y de didgeridoo, que emergen como enclaves space-rockeros en esta instancia de la pieza, ocupan un rol central dentro del enriquecimiento de matices que, en estas circunstancias, opera prácticamente como centro temático, yendo más allá de una simple estrategia de ornamentaciones. En medio de todo esto, el trío da la apariencia de haber matizado un poco la musculatura inicial, pero si escuchamos con más atención, lo que realmente se ha dado ha sido un aumento de la sofisticación. Esto se nota en lo que se gesta para la tercera y última parte del jam, un rol destacado de los guitarreos con miras a realzar la esencia stoner-psicodélica de la pieza, reforzando el vigor y la intensidad mientras se recibe los ecos de la sofisticación cósmica de la parte precedente. El bajo, al distorsionar masivamente las resonancias de sus pulsaciones, colabora muy eficazmente con el aumento de estas vibraciones tormentosas, y, además, obliga a la batería a intensificar su punche. Los dos últimos minutos exhiben un clímax rockero magníficamente vibrante, dejando bien grabada su fuerza incendiaria en la mente del oyente varios minutos después de haberse acabado todo.

“Spaceflowers” es un estupendo ejemplo de lo que todavía tiene por ofrecer el ideal del space-rock dentro de la vanguardia rockera contemporánea: vayan nuestras palabras de agradecimiento a THE SPACELORDS por habernos brindado este gozo melómano tan potente y contundente. 



Muestra de “Spaceflowers”.-


miércoles, 4 de noviembre de 2020

Programa #273 - Surtido variado de rock progresivo

Taskaha - Taskaha

Con ustedes, el podcast 273 de Cerca de la Orilla, para que lo tengan y lo escuchen a la hora que quieran. 

Esta emisión tuvimos un surtido variado y diverso de gran rock progresivo para disfrute de todos ustedes. Disfruta gran material de Frits & The Highest Band, Grus Paridae, Ande, Taskaha, Zahorí y Aisles.

Podcast: 


Lista de canciones: 

Urge for the Gray Rainbow - Artista Grus Paridae 

Father Sun - Artista Ande, disco Echoes of the Mountain 

March to the Top of the Mountain - Artista Ande, disco Echoes of the Mountain 

La danza del galgo - Artista Zahorí 

Smile of Tears (versión 2020) - Artista Aisles 

Red Sector A (Rush cover) - Artista Aisles 

Juan saltó del techo - Artista Frits & The Highest Band 

The Climb - Artista Taskaha, disco Taskaha 


Ficha técnica: 
Fecha de publicación: 4/noviembre/2020 
Rúbricas: Nora García 
Producción integral: Javo Aguirre 

¡Progresivos saludos!

viernes, 30 de octubre de 2020

El retorno de unos gigantes del prog italiano del nuevo milenio: LA MASCHERA DI CERA


HOLA, AMIGOS DE CERCA DE LA ORILLA, LES SALUDA CÉSAR INCA.

¡Albricias desde la escena progresiva italiana! El colectivo de LA MASCHERA DI CERA ha vuelto al ruedo con su nuevo disco “S.E.I.”, el que sucede tras una larga hibernación de 7 años a “Le Porte Del Domani”, su homenaje-secuela al clásico álbum de LE ORME “Felona E Sorona”. “S.E.I.” ha sido publicado por el sello A.M.S. Records tanto en CD como en vinilo (edición limitada de color verde). Ahora centrado en el triunvirato de Alessandro Corvaglia [voz, coros, guitarra acústica, pandereta y palmas], Fabio Zuffanti [bajos, pedales bajos, palmas y coros] y Agostino Macor [órganos Hammond, Wurliter y Tiger, pianos de cola y eléctrico, mellotrón, sintetizadores, clavicémbalo y mandolina] para esta nueva etapa de su carrera, el personal de LA MASCHERA DI CERA creó este álbum conceptual en torno a tres grandes malarias de la civilización humana: la alienación, el narcisismo y la falsedad. De ahí viene el título de este álbum de retorno, que consiste en las siglas de las palabras separazione, egolatria e inganno. Como tres no son suficientes para concretar el ambicioso sonido retro-progresivo ecléctico que caracteriza a LA MASCHERA DI CERA desde siempre, el trío contó con las colaboraciones del veterano de DELIRIUM Martin Grice (flauta y saxos soprano y barítono) y el exintegrante de IL TEMPIO DELLE CLESSIDRE Paolo Tixi (batería). Lo que encontramos en “S.E.I.” es, básicamente, un enfoque de recuperación del elemento más árido del sonido tradicionalmente desarrollado por el grupo a través de sus anteriores año de vigencia; para ser más específicos, se trata de un rescate del esquema de trabajo planteado en su disco homónimo de debut (2002) como del segundo álbum “Il Grande Labirinto” (2003, que sigue siendo nuestro preferido de toda su carrera fonográfica hasta ahora). Pero, además, de eso, el trío ha realizado la doble labor de reforzar esa ambientación aguerrida con envolventes esquemas melódicos (que siempre fue su marca de la casa) y de abrir nuevos campos a aires climáticos dentro de los ambiciosos desarrollos multitemáticos (especialmente, en las dos pieza más extensas). Eso último se debe básicamente al rol que ha tenido el factor jazz-progresivo dentro de la esencia predominantemente sinfónica de LA MASCHERA DI CERA. Todo este nuevo material fue grabado en el Greenfog Studio de Génova, siendo luego masterizado en Audiomaster, estudio ubicado en Milán. Veamos ahora los detalles musicales del repertorio contenido en este disco.


Comenzamos revisando la suite ‘Il Tempo Millenario’, que dura casi 21 ¾ minutos y contiene las secciones ‘L’anima In Rovina’, ‘Nuvole Gonfie’, ‘La Mia Condanna’, ‘Separazione’ y ‘Del Tempo Sprecato’. La suite arranca con una primera sección signada por el empuje asertivo y agurrido que nos remite a una remodelación del paradigma Emersoniano a través del filtro de ALPHATAURUS, y poco más adelante las cosas se calman para que la primera sección cantada se oriente hacia unas delicadas vibraciones introspectivas cuyos implementos centrales son la flauta, el mellotrón y la guitarra acústica: ya opera aquí un híbrido entre CELESTE y los GENESIS de la fase 70-72. La segunda sección cantada se asienta sobre un groove más ágil que organiza una ingeniería sonora que transita entre el sinfonismo clásico, el jazz-prog y la faceta misteriosa de unos VAN DER GRAAF GENERATOR; además, con el mellotrón coral se añaden algunos ornamentos sombríos al desarrollo temático en curso. Los aportes de saxo y flauta encuentran espacios de sobrio lucimiento en medio del armazón discreto concretado por la dupla rítmica y las incesantes bases armónicas y capas de teclado (especialmente, el órgano y el mellotrón). A poco de pasada la frontera del décimo primer minuto, un par de minúsculos interludios sucesivos de piano y clavinet abren paso a otro pasaje de tenor misterioso y matices sombríos, aunque en esta ocasión se advierte un cierto aumento del vigor rockero en el paisaje instrumental que roda al canto de Corvaglia (un canto un tanto furioso en este momento). La siguiente sección regresa de lleno a la extroversión motivada por el cruce de sinfonismo y jazz-prog, una vivacidad intrépida y expresionista que en sus primeras instancias adquiere un impulso especial merced a la intervención de uno de los más notables solos de saxo de todo el álbum... y mas adelante gozaremos de otro solo de saxo brutal. Por su parte, el bajo se hace notar con su generosa dosis de fuzz. Poco antes de llegar a la frontera del minuto 18, la intrepidez aumenta un poco para cerrar este pasaje a fin de abrir camino a la sección epilogar, la cual se caracteriza por una ceremoniosidad contundente y absorbente. La articulación de orquestaciones de diversos mellotrones y un cósmico solo de sintetizador marca el camino para el bloque global mientras Corvaglia termina de cantar todo lo que tiene que decir. Solo con esta suite tenemos la evidencia certera e inconfundible de que la esencia de LA MASCHERA DI CERA ha reflorecido a lo grande... pero, por supuesto, hay más.

Durando cerca de 10 minutos, ‘Il Cerchio Del Comando’ abre la segunda mitad del álbum y lo hace con la estrategia de insertar elementos y recursos de folk-rock dentro del entramado prog-sinfónico a lo largo del cual se van hilando todos los motivos aquí incluidos. Hay una gracilidad perpetua en el accionar de la dupla rítmica a través de las variantes de motivo y compás, espacios estratégicamente servidos para el lucimiento de la flauta y un persistente aire de celebración. Notamos las influencias de los PREMIATA FORNERIA MARCONI de los dos primeros álbumes, los JETHRO TULL de la fase 77-78, GENESIS, y, en menor medida, los paradigmas de MAXOPHONE y LOCANDA DELLE FATE. La claridad melódica está garantizada tanto por la delicada meticulosidad en las complementaciones y diálogos entre los instrumentos actuantes como por la fluidez con la que enrumban las variaciones de la ingeniería rítmica. Si la suite de entrada fue como una visita a todos los rincones de un ampuloso palacio, esta segunda pieza del álbum parece simbolizar una jovial caminata por sus jardines exteriores. ‘Vacuo Senso’, que dura 13 ½ minutos, cierra el repertorio y lo hace a lo grande, heredando en buena medida las facetas más dramáticas de la suite inicial. También contiene secciones con títulos autónomos: ‘Prologo’, ‘Dialogo’, ‘Nella Rete Dell’inganno’, ‘Il Risveglio Di S’ y ‘Ascensione’. Su comienzo es solemne y melancólico, pero pronto pasa a una exhibición de densa vitalidad que rezuma una gravedad misteriosa; esto remite a una cruza entre OSANNA, VAN DER GRAAF GENERATOR y ELP. Para la primera intervención cantada, todo se sosiega drásticamente virando hacia una aureola de flotante introversión, marcada por una vulnerable sutileza bucólica. Luego sigue una hermosa y bastante generosa sección jazz-progresiva de tenor Canterbury (un poco de EGG por aquí, un poco de HATFIELD AND THE NORTH por allí) donde el swing arriba a dimensiones de señorial sensualidad, abriendo caminos para las emergencias de sucesivos solos de saxo, sintetizador y órgano, los mismos que completan debidamente el potencial de fulguroso colorido aludido por las bases organizadas por los demás instrumentos. De a pocos, el ensamble regresa al vigor estructural que había gobernado la logística sonora en un pasaje anterior. Tras un efímero interludio minimalista, el epílogo instrumental instaura una majestuosa y parsimoniosa aura de conmovedora majestuosidad prog-sinfónica; las bases de mellotrón son replicadas por un piano solitario en la coda, la cual rápidamente se disuelve en un evocador fade-out


Todo funcionó muy bien en la gestación, el desarrollo y la producción del material contenido en “S.E.I.”, lo cual pone desde el primer instante de éste, su retorno, a LA MASCHERA DI CERA en un sitial privilegiado dentro de la aristocracia progresiva italiana del nuevo milenio. Este formación tripartita ha resucitado y remodelado el vigoroso legado musical que solía hacerse a cinco bandas. ¡Ha regresado un gigante!, ¡a darle la corona y el cetro que le corresponden con toda justicia!



Muestra de “S.E.I.”.-
Il Tempo Millenario: https://lamascheradicera.bandcamp.com/track/il-tempo-millenario 


Más críticas de Cesar Inca en: Autopoietican - Apuntes de Musica Progresiva Contemporanea                

martes, 27 de octubre de 2020

Programa #272 - Alpha Lighting System (segunda parte)

Alpha Lighting System - H+

Con ustedes, el podcast 272 de Cerca de la Orilla, para que lo tengan y lo escuchen a la hora que quieran.

Esta emisión fue la segunda de dos partes dedicadas al grupo mexicano de rock progresivo Alpha Lighting System, donde además de apreciar su material musical, tuvimos una amena charla con sus cuatro integrantes: Alam Hernández, Joshua San Martín, Jaco Jácome y Juan Gabriel Hernández.

Podcast:


Lista de canciones: 

Alisson - Artista Alpha Lighting System, disco H+ 

Gone - Artista Alpha Lighting System, disco H+ 

2872 - Artista Alpha Lighting System, disco H+ 

Suite H+ - Artista Alpha Lighting System, disco H+


Ficha técnica: 
Fecha de publicación: 27/octubre/2020 
Rúbricas: Nora García 
Producción integral: Javo Aguirre 

¡Saludos progresivamente mexicanos!

martes, 20 de octubre de 2020

Programa #271 - Alpha Lighting System (primera parte)

Alpha Lighting System - 836

Con ustedes, el podcast 271 de Cerca de la Orilla, para que lo tengan y lo escuchen a la hora que quieran.

Esta emisión fue la primera de dos partes dedicadas al grupo mexicano de rock progresivo Alpha Lighting System, donde además de apreciar su material musical, tuvimos una amena charla con sus cuatro integrantes: Alam Hernández, Joshua San Martín, Jaco Jácome y Juan Gabriel Hernández.

Podcast: 


Lista de canciones: 

Spaceport - Artista Alpha Lighting System, disco 836 

Bioelectrogenesis - Artista Alpha Lighting System, disco 836 

Hazard (live) - Artista Alpha Lighting System, disco Live at Progtoberfest / Chicago 

Psychosis - Artista Alpha Lighting System, disco 836 


Ficha técnica: 
Fecha de publicación: 20/octubre/2020 
Rúbricas: Nora García 
Producción integral: Javo Aguirre 

¡Saludos progresivamente nacionales!

sábado, 17 de octubre de 2020

Cuarto tesoro exhibido desde la nave pirata de los MOON MEN

Moon Men - Tales From The Space Pirates

HOLA, AMIGOS DE CERCA DE LA ORILLA, LES SALUDA CÉSAR INCA.

Hoy nos complace enormemente presentar el nuevo disco del fabuloso e inquieto cuarteto estadounidense MOON MEN, colectivo especialista en cultivar un estupendo híbrido de space-rock, jazz-prog a lo Canterbury, experimentaciones psicodélicas y avant-prog: nos referimos a “Tales of the Space Pirates”, su cuarto disco de larga duración, el cual salió al mercado el pasado 18 de septiembre. Al modo de GONG y varios grupos de línea Zeuhl, el grupo se presenta con seudónimos para cada integrante y eufemismos dadaístas para designar los instrumentos a cargo de ellos: Sgt. Cthulhu Moone (Jerry King), se encarga del bajo, el trombón y algunas guitarras; Eschaton Crater (Bret Hart) es el guitarrista principal, y además, toca el sintetizador, la armónica y realiza labores de efectos de sonido y deconstrucción de los ítems grabados desde la consola; Major Dom Fook (Dave Newhouse, el mismo de THE MUFFINS y MANNA / MIRAGE), toca diversos teclados y saxofones, además de algo de clarinete; Billzilla (Bill Jungwirth) es el baterista. La edición física de “Tales of the Space Pirates” se reduce a una cantidad de 100 ítems en formato de CD-R con un código para la descarga digital adicional, aunque también puede se comprar la sola descarga digital en el blog de Bandcamp de Newhouse [dirección: https://davenewhouse.bandcamp.com/album/tales-of-the-space-pirates]. En cuanto a los detalles técnicos del disco que ahora reseñamos, éste fue mezclado y masterizado por Ian Beabout (habitual colaborador en estas lides de muchas figuras de la vanguardia estadounidense) en el ShedSounds Studio; mientras tanto, el arte gráfica del álbum fue realizada por Bret Hart, mientras que el diseño del álbum estuvo a cargo de Eric Kearns en PhinBot Graphics. Todas las composiciones son acreditadas al ensamble íntegro, aunque siempre hay uno o dos de sus integrantes con los que la idea se inicia. Bueno, centrémonos ahora en la música misma que aparece en el repertorio, ¿vale? 

La dupla de ‘Life Of The Automaton Accountant’ y ‘Andy Had Gills (For Andy Gill)’ ocupa los primeros 8 ¼ minutos del álbum, instaurando varias matrices y enfoques sonoros para la estrategia general del álbum. En el caso del primero de estos temas, el ambiente central es grácil y aguerrido a la vez, debiéndose lo primero al excelso groove jazz-rockero creado por la batería, mientras que lo segundo reposa sobre los hombros de los ornamentos de sintetizador y los flotantes fraseos de la guitarra; estos dos últimos ítems exudan vitalistas dosis de garra en clave cósmica. Por su parte, ‘Andy Had Gills (For Andy Gill)’ se centra en un encuadre más explícitamente ágil, organizando un clima luminoso y jovial que mayormente se contrasta frente a la moderada densidad que reinó imponentemente en la pieza precedente. Este segundo tema suena a una versión estilizada de los CAN de la época 70-72 a través del filtro Zappiano de fines de los 70s en su faceta más cálida, más algunos oportunos toques de space-rock al estilo de GONG. Hemos tenido dos variantes interesantes para estas instancias iniciales del álbum. ‘Space Hero Theme Song’, que es la pieza más breve del disco con sus poco menos de 3 minutos de duración, expone muchas cosas. Comienza con una ceremoniosa fanfarria de vientos, cuyo impacto es inicialmente coactado por la irrupción de un motif de tenor free-jazz alimentado por efectos de sonido psicodélicamente estrambóticos, pero mientras éste se va asentando a su propio ritmo, se retoma el motif de la fanfarria inaugural con un talante más lírico, siendo así que la flauta asume el rol protagónico para este factor particular mientras el caos organizado de los demás instrumentos sigue vigente en sus pulsaciones deconstructivas. Convivencia de arquitectura melódica e incertidumbre. ‘Paper Ball For Kitty’ establece un ejercicio de atmósferas Canterburyanas (al estilo de un híbrido de NUCLEUS y los SOFT MACHINE de la etapa 71-73) sobre la base de un groove otoñal propio de los dos primeros álbumes de WEATHER REPORT. La verdad que nos saben a muy poco los cuatro minutos y medio destinados para esta estupenda idea, pero es que ya llega el turno de ‘Sliding On The Moone’. Este quinto tema del álbum regresa a la agilidad luminosa del ítem #2 y le añade cuotas blues-rockeras por vía de las intervenciones de la armónica y sencillos solos de guitarra dentro de la amalgama sonora. Básicamente, se trata de un jam space-rockero de tenor pop y con los mencionados ornamentos blueseros; la batería se luce a voluntad en sus ornamentos mientras centra la ingeniería rítmica para el bloque performativo. 

‘Graham Crackers In The Monastery’, más bien, nos devuelve al groove relativamente parsimonioso de la pieza inaugural del álbum, pero esta vez, recogiendo las semillas de extravagante exuberancia del tercer tema del álbum. Las exploraciones relativamente libres de los teclados y los vientos contrastan abiertamente con la disciplina estricta del bajo y el sitar eléctrico, siendo así que con ellas se arma un diálogo dinámicamente integrador. Con la ilación de ‘The Chemicals I Ate Did It’ y ‘Unknown On The Telephone’, el ensamble sigue explorando caminos de vitalismo ecléctico en clave progresiva. El primero de estos temas se orienta hacia una cruza entre lo melancólico y lo sombrío dentro de un enclave jazz-progresivo arropado por un grueso manto etéreo de naturaleza frontalmente psicodélica. Aquí resuenan ecos de AGITATION FREE, KING CRIMSON y la asociación de THE MUFFINS con HENRY COW. Por parte del segundo de estos temas mencionados, el grupo decide enfocarse en un clima juguetón no demasiado extrovertido, pero sí generoso en alusiones satíricas expresadas cabalmente por las líneas de los múltiples saxos y los guitarreos (tanto eléctricos como acústicos). Imaginemos una partitura perdida del ZAPPA de la etapa 72-73 que fue rescatada, apropiada y remodelada por los HENRY COW durante su última gira... algo así. ‘Space Opera Blues’ vuelve al matrimonio de blues-rock y space-rock con elementos añadidos del dadaísmo combativo de CAPTAIN BEEFHEART. En términos de sofisticación típicamente progresiva, se da aquí un explayamiento de variantes temáticas más ambicioso que en ‘Sliding On The Moone’, lo cual se traduce en un ejercicio arquitectónico mucho más exigente. El grupo se reserva la pieza más extensa del álbum para el final: ‘Journey To The Plains Of Obmurd’, que dura casi 8 minutos. Todo comienza con un prólogo expectante que anticipa la instauración de un swing ceremonioso; esto no dura mucho, pero da un apropiado impulso a una base armónica de guitarra para que establezca un punto de referencia repetitivo para un extrañamente cautivador empuje de ornamentos sonoros que se van aunando con una lucidez deconstructiva. Todo se va armando aleatoriamente dentro de una refinada estrategia de interacciones casuales que se van manejando a lo largo del camino, y solo a poco de pasada la frontera del quinto minuto emerge la batería con un groove reconocible, aunque sus mismos ornamentos impiden que el grupo asuma un enfoque ágil. Por el contrario, este recurso no tardó mucho en revelarse como otro evento aleatorio, pasando luego a armar un breve swing tribal con el que invita a sus compañeros a finiquitar sus exploraciones. En perspectiva, advertimos que esta pieza de cierre fue un paseo por el patio de recreo donde se organizó una esquematización osada de los aspectos posmodernistas que muchas de las piezas precedentes operaron como ornamentos; en esta ocasión, ellos tomaron las riendas de la creatividad sonora en curso. 

Todo esto es lo que gestó, gestionó y grabó el personal de MOON MEN para “Tales of the Space Pirates”, una pletórica exhibición de creativos tesoros musicales desde su nave de eclécticas aventuras progresivas. Tal vez resulta nuestro disco favorito de ellos hasta el momento, y realmente exige gran talento y una visión clara sobre el enfoque experimental del rock el haber consumado este disco tan excelso sin haber llegado a ningún tipo de agotamiento con toda la cantidad de discos de larga duración y EPs que los MOON MEN tienen en su haber desde hace solo tres años. Manejando a cabalidad discursos y recursos propios de la psicodelia, el jazz contemporáneo, las tradiciones del Canterbury y el RIO, el blues-rock y el space-rock, este cuarteto sigue firmemente asentado en un lugar destacado dentro de la élite de la vanguardia estadounidense. ¡¡Recomendado al 400!! (Un 100% por cada pirata involucrado en esta labor.) 



Muestras de “Tales of the Space Pirates”.-